ISR es el producto de más de 40 años de investigación y desarrollo. La técnica se sustenta en los campos científicos de medicina preventiva, psicología, ciencias conductuales, anatomía y fisiología. El foco de ISR está en la prevención de ahogamientos enseñándole a bebés y niños a sobrevivir y no solamente a nadar. ISR los capacita para que puedan resolver conflictos en el agua y reaccionar sin pánico ante una situación de peligro. Las probabilidades de supervivencia ante un accidente acuático aumentan notablemente en bebés o niños capacitados en ISR.
¡Absolutamente! ISR cuenta con numerosos protocolos de seguridad y monitoreo antes y durante el curso. Las clases son individualizadas dependiendo del historial médico y experiencia anterior en el agua de cada niño. La salud y el comportamiento dentro y fuera del agua son controlados de cerca por el instructor durante todo el curso.
Cada instructor certificado pasa por un exhaustivo entrenamiento individual con un Instructor Master en donde es evaluado en todos los conceptos académicos y tiene una práctica dentro del agua superior a las 60 horas con alumnos de todas las edades. Además, cada año los instructores deben re-certificar su título asegurando así la calidad y consistencia del programa a nivel mundial.
Considere lo siguiente:
• En nuestras lecciones ningún niño es tirado dentro de la piscina.
• Un niño nunca es sumergido por más de 7 segundos.
• Los instructores de ISR monitorean la temperatura y fatiga muscular de su hijo/a, así también como el cansancio físico y psicológico.
• Las rutinas diarias fuera de las clases de ISR son evaluadas por los datos que usted provee a su instructor.
Los instructores de ISR enseñan a su niño a nadar respetando las características individuales y experiencias de cada niño. Se les permite explorar el ambiente acuático de forma guiada y así es como, a través de experiencias sensorio-motoras, los niños adquieren las destrezas acuáticas de supervivencia
Los padres inscriben a sus hijos porque comprenden la importancia del desarrollo de las habilidades de los pequeños y quieren darles la oportunidad para que las adquieran. Ellos también sienten que es importante enseñar a sus niños cómo deben flotar y respirar para poder encontrar la salida del agua por sí mismos y a estar a salvo. Las investigaciones muestran que hay mejores momentos para aprender ciertas Replica uhren cosas y natación es mejor aprenderla en edades tempranas. (NewsWeek and Drowning Statistics)
Nadar es una destreza sensorio- motriz. Una vez aprendida, no se olvida. Es parecido a aprender a correr bicicleta, una vez que se ha aprendido, usted siempre sabrá cómo hacerlo. Pero correr bicicleta después de un largo tiempo sin correrla o montarse en una bicicleta más grande, puede ser difícil al principio. De la misma manera, aunque a su niño no se le olvidarán las destrezas acuáticas de supervivencia, pueden ser más difíciles de realizar si su niño ha crecido significativamente o si su niño está en una situación acuática distinta, tal como caerse en un río o un lago cuando su niño está acostumbrado a nadar en una piscina. Por esto, las clases de repaso son muy importantes. Las clases de repaso ayudan a asegurar que su niño pueda realizar estas destrezas con un cuerpo más grande, más maduro y le ayudan a darle a su niño confianza en sus destrezas acuáticas. La confianza es clave. Una persona que sabe nadar se puede ahogar si cae en pánico en el agua. Tener confianza en sus destrezas en el agua y tener la capacidad de ajustarse a una variedad de situaciones acuáticas es crítico para la supervivencia acuática.
El Dr. David Carr, pediatra en Orlando, Florida, condujo un extenso estudio sobre ISR. A través de link http://infantswim.com/drcarr.htm puede leer los resultados. Después de completar este estudio, el Dr. Carr y su esposa inscribieron a su hija en las clases de ISR.
Un bebé no necesita percibir peligro o tener miedo para responder apropiadamente al estar en agua. Si un bebé aprendió a voltearse y flotar cuando está en el agua, no necesita percibir peligro para poder responder de esta manera. Necesita habilidad, práctica y confianza para poder manejar la situación con calma. replicas relojes
Llorar es su forma de comunicarse para la mayoría de los bebés. Hay diferentes tipos de llanto y es importante saber y educarse qué significan. Para un principiante, las primeras semanas del curso son cruciales en su adaptación a un nuevo ambiente, al instructor y a la técnica. Cada niño es un individuo y reacciona a la clase de manera diferente. Algunos nunca lloran y muchos otros dejan de llorar cuando se sienten en confianza con lo que han aprendido a hacer en el agua. Es bien importante que los papás sean el ejemplo, manteniendo una actitud positiva sobre las clases mientras esté en piscina o cuando esté comentando de las clases frente al niño.
No queremos que el bebé, inicialmente, relacione el agua con el amor, atención y afecto de los padres. Además, se necesita una increíble concentración y objetividad para enseñar a un bebé a responder adecuadamente a una emergencia acuática y nuestras investigaciones demuestran que a la mayoría de los padres se le hace sumamente difícil ser lo suficientemente objetivos para poder enseñar efectivamente a sus propios hijos.
Hay una diferencia importante entre sentir miedo y estar aprensivo a una situación peligrosa que requiere habilidades que todavía no posees. ISR no es como las clases de natación tradicionales; es un programa de prevención que enseña a tu hijo supervivencia acuática. Probablemente al principio, tu hijo no asistirá felizmente a sus clases de ISR, pero eso está bien. A veces, como padres, nos aseguramos que nuestros hijos hagan ciertas cosas por su propia seguridad, como recibir vacunas y utilizar el cinturón de seguridad, porque sabemos que son importantes. Lo mismo se puede decir de ISR.
Cuando aprendes sobre ISR, sabes que es el nivel de protección más importante que le puedes dar a tu hijo/a para prevenir un ahogamiento. Si las verjas, supervisión y/o alarmas fallan, las habilidades que tenga tu hijo gracias a ISR son una protección adicional.
Los aparatos para flotar le dan a tu hijo una sensación de seguridad falsa. Además, que los ponen en una posición vertical en su sistema muscular, la cual no es compatible con las habilidades para nadar o flotar. Las bollitas son para niños que no pueden nadar. Mientras dependan de un salvavidas, no se les debe permitir jugar en el agua a los niños que no saben nadar. Los chalecos salvavidas deben ser utilizados en una lancha, barco o alrededor del agua, cuando hay posibilidades de ser sumergido accidentalmente. Sin embargo, no son un sustituto para saber nadar o para la supervisión de un adulto.
El fundador de ISR, Dr. Harvey Barnett, ha trabajado arduamente con niños con varias discapacidades físicas y mentales. ¡Muchos de estos niños han completado exitosamente las lecciones de ISR y a menudo se sienten particularmente orgullosos de sus logros acuáticos! Si su niño tiene una discapacidad física o mental, nosotros le sugerimos que se comunique con ISR directamente para que ellos puedan obtener información médica más detallada y discutir con usted cuales instructores en su área están cualificados para enseñarle a su niño.
Siempre recuerda que no hay ningún sustituto para la supervisión de un adulto, pues no hay nada que haga un niño a prueba de ahogarse. ISR recomienda siempre varias capas de protección para la seguridad en el agua en tu casa.
Recomendamos que la verja tenga 4 pies de alto como mínimo, con barrotes verticales separados por una distancia máxima de 3.9 pulgadas. Jamás colocar muros o sillas que faciliten el acceso tipo escalera. Debe contar con sola puerta de acceso con un sistema de auto cierre que los niños no puedan abrir. Mantenga los juguetes guardados, ya que muchos niños pueden trepar ayudándose de un elemento externo y brincar la verja.
Tener juguetes cerca o alrededor de la piscina es invitar a los niños a esa área. Juguetes que rueden no deben usarse nunca alrededor de la piscina.
Esto facilitará que su hijo pueda agarrarse del borde de la piscina, pueda salir solo o llamar por ayuda.
Las alarmas de piscina cuentan con un sistema que activa una sirena si la superficie del agua se rompe. Además, muchas alarmas pueden programarse para que cada vez que se abra la puerta que dé a la piscina, suene. La desventaja de esto es que este tipo de alarmas, al sonar de manera repetitiva, pueden convertirse en un sonido familiar al que no prestamos atención.
En caso de cualquier accidente puede llamar al 911 de manera inmediata y sin tener que abandonar el área de la piscina. Este teléfono no debe ser usado para ninguna otra cosa, ya que la supervisión de su hijo en el agua es fundamental.
Los flotadores muchas veces pueden dar una falsa sensación de seguridad para padres e hijos. Estos elementos pueden fácilmente desinflarse o salirse del brazo de su hijo dejándolos en una situación potencialmente peligrosa.